La Crisis Medioambiental del Lago Poopó


Vista satelital Lago Poopó, 2018

El Lago Poopó, ubicado en el Departamento de Oruro, declarado Patrimonio Nacional y Reserva Ecológica de Bolivia, además de formar parte de los Sitios Ramsar desde el año 2002 (Richard y Contreras, 2015) es un lago que podríamos considerar como un "ave fénix". Esto debido principalmente al hecho de haber desaparecido durante el año 2015 debido a un efecto combinado del fenómeno del niño y el aumento en un grado centígrado producto del calentamiento global, lo que sumado a su escasa profundidad y al mal uso de los recursos hidrológicos, provocaron la evaporación del lago (Richard y Contreras, 2015), al mal uso de los recursos, generando una gravísima crisis ecológica y económica que afectó a la población local y nativa de la zona; para volver a llenarse de agua este año 2018 debido a las constantes lluvias.
Lago en sequía


¿Qué elementos han influido en este lago para que se desatara una crisis ecológica como esta?

Entre los principales elementos que afectan al lago Poopó podemos encontrar tanto bióticos, como abióticos. Entre los elementos abióticos que afectan al lago se encuentran:
  • Profundidad: El Lago Poopó tiene una profundidad promedio de 1,4 metros.
  • Altitud: Este lago se encuentra a 3.686 de altura sobre el nivel del mar.
  • Salinidad: Poopó corresponde a un lago salino, por lo que su salinidad es bastante elevada.
  • Fenómenos ENOS (Etapa de El Niño): Provocando un alza de temperatura que evapora el agua a gran velocidad, trasladando las lluvias hacia el este de la región.
  • Vientos del Oeste: Arrastran Sedimentos del Desierto de Atacama al Lago Poopó.


Actividad Humana como factor abiótico desencadenante de desastres

El factor humano podríamos decir que incluso trascendental para el desencadenamiento de la crisis, dado que, las actividades económicas en la zona ha provocado el desvío de los afluentes que alimentaban al Poopó.

Las principales actividades económicas de la zona, son aquellas relativas a la actividad minera. Históricamente, desde inicios de la época colonial la actividad minera sería uno de los focos económicos importantes de la zona, pero no es sino hasta el siglo XX en que la minería de extracción de estaño se asentó con fuerza, humanizando fuertemente el sector y demandando mucha agua de los afluentes que rellenaban el lago, arrojando desechos de metales pesados y acidificando fuertemente, y hasta el día de hoy, las aguas de los ríos de la zona, lo que ha generado degradación tanto en aguas como en suelos de los sectores bajos de los afluentes y del Lago Poopó (Perales, 2010).

Al día de hoy, la situación no ha cambiado mucho, si bien existe una legislación que determina el cuidado de las zonas protegidas y los mecanismos para una correcta eliminación de desechos tóxicos para la actividad minera, el manejo de residuos sigue siendo negligente, por lo que campesinos, comunidades indígenas, ganaderos y pescadores se han unido para solicitar al Estado la mitigación de los impactos ambientales (Perales, 2010).


Elementos Bióticos del Lago Poopó: las víctimas silenciosas.

Respecto a los elementos bióticos que afectan al lago, debemos hacer hincapié en que estos subsisten gracias al lago, Poopó es la fuente de agua de muchas formas de vida animal y vegetal que hoy se encuentran en peligro:
  • Productores: Utilizan sus propios medios para producir su alimento, corresponden a plantas como especies de cáctus, tolas, pajonales, entre otras.
  • Consumidores: Es decir, aquellas especies que consumen el alimento producido mediante otras especies, como especies animales, principalmente representado en esta zona por la keñola, flamencos, especies de patos y gaviota andina, además de pumas, vizcachas y vicuñas.
Keñola


El riesgo...

La contaminación y la sequía han puesto en peligro a muchos de los animales del lago, un claro ejemplo de esto es lo ocurrido con los flamencos, dado que, de las cinco especies existentes, tres habitan en Bolivia, y todas estas se encuentran en peligro de extinción, dado que en su periodo de migración, el humedal es la zona de descanso predilecta de estas, así mismo, para otras aves el lago Poopó es su hábitat habitual, como es el caso de la keñola.

Mamíferos como el puma y la vizcacha necesitan de las aguas del Poopó, y de las aves que migran a él, dado que al ser carnívoros, las cazan o se alimentan de sus huevos.

Finalmente, el caso de los peces es emblemático, numerosas han sido las imágenes en donde se aprecia el cuerpo seco de un pez con el fondo de una tierra muerta, la que correspondía antes a la zona en donde se hallaba el lago. La actividad ictícola es muy importante para las comunidades indígenas que practican la pesca de sobrevivencia; sin peces, muchas comunidades han comenzado a migrar (Perales, 2010)



Fuentes:







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